Riley (Alexandra Shipp) y Chris (Nicholas Hamilton) son dos jóvenes perdidamente enamorados, pero su historia de amor concluye de forma repentina debido a un accidente automovilístico. Riley se siente responsable por la muerte de su pareja, quien ha quedado atrapado entre las sombras. No obstante, ambos logran descubrir de manera sorprendente una manera de reunirse nuevamente.