En este mundo, ya se ha comprendido que el amor eterno es una ilusión. Por esta razón, hay una compañía que se encarga de descubrir la pareja ideal cada cuatro años. Después de disfrutar de unos días de relajación, Fran se encuentra con Roque, quien rápidamente comienza a ganarse su corazón, a pesar de que al principio no logran comunicarse. Con el paso del tiempo, ambos aprenden a entenderse y Fran vive una emoción que nunca había experimentado. ¿Sería un desastre si optaran por estar juntos más de cuatro años?