Harry Potter es un niño huérfano que reside con sus antipáticos tíos, los Dursley, y su molesto primo Dudley. A medida que se aproxima su undécimo aniversario de nacimiento, él no tiene muchas expectativas de recibir un obsequio, puesto que prácticamente nadie se acuerda de él. No obstante, unos días antes de su cumpleaños, una serie de enigmáticas cartas dirigidas a él, escritas con una llamativa tinta verde, irrumpen en la rutina de su existencia: Harry es un mago y sus padres también lo eran.