La vida de Helen Reddy comienza en 1966, cuando llegó a Nueva York junto a su hija de tres años, portando solo una maleta y 230 dólares. En pocas semanas, se encontraba en una situación financiera desastrosa. Sin embargo, en pocos meses, encontró el amor. En tan solo cinco años, se convirtió en una de las más grandes superestrellas de su época y un símbolo del movimiento feminista de los años 70, gracias a una canción que inspiró a toda una generación de mujeres a luchar por la transformación social.