Jane Eyre (Mia Wasikowska), una joven criada en un orfanato y con una infancia complicada, es empleada por Edward Rochester (Michael Fassbender) para desempeñarse como tutora de una niña en Thornfield House. La solitaria y oscura mansión, junto con la fría actitud inicial de su propietario, desafían la determinación de la joven. No obstante, con el tiempo, ella comienza a sentir un profundo amor por él.