Neneta reside en la costa de Almería en una furgoneta junto a su pareja, Lobo. El mismo día que Lobo supuestamente comenzaba un nuevo empleo, decide dejarla. Ella recoge sus pertenencias y regresa con su bebé a su pueblo natal en Galicia. Al volver a su pueblo industrial y en decadencia, enfrenta numerosas dificultades y solo logra conseguir un trabajo como peón en la construcción.