Durante la Edad Media, el indomable Goldmundo es llevado a un monasterio por mandato de su padre. En ese lugar, el joven se encuentra con Narciso, un novicio sabio, culto y reservado, entregado por entero a la vida ascética. Esta relación dará origen a una amistad singular y perdurable, que será desafiada por el destino cuando sus caminos amenacen con separarse debido a sus estilos de vida tan diferentes.