Filmada en un único plano secuencia, la película se desarrolla en el emblemático barrio de Kreuzberg en Berlín. La cámara se convierte en espectadora de los acontecimientos que vive la joven Victoria, una española residente en la ciudad, a lo largo de dos horas cruciales de su existencia: desde las cuatro de la madrugada hasta las seis. En ese intervalo, se encuentra con cuatro chicos cuya noche apenas comienza, y experimenta una serie de sucesos que cambiarán radicalmente su vida.